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El 4 de marzo finalizó el intenso bombardeo de las fuerzas rusas. Reglamento de la central nuclear de Zaporizhia, el más grande de toda Europa. La adquisición de la planta generó temores de un desastre nuclear inmediato. Sin embargo, después de algún tiempo, Ucrania confirmó que los niveles de radiación estaban dentro de los límites normales.
Muchos líderes mundiales acusaron a Rusia de ser irresponsable por poner en peligro la seguridad de todo un continente. Volodymyr Zelensky dijo que Moscú está tratando de repetir lo que sucedió en Chernobyl en 1986.
Los meses siguientes vieron una serie de enfrentamientos entre tropas ucranianas y rusas en Zaporizhia. En agosto, las acciones de Moscú provocaron un apagón en una planta de energía nuclear durante horas y provocaron un desastre de radiación en Europa.
En septiembre, varios miembros de la Agencia Internacional de Energía Atómica, incluido el director general, Raffaele Grossi, visitaron las instalaciones y prometieron que sus expertos permanecerían en la planta para realizar inspecciones, a pesar de los bombardeos rusos en la región. El director de la OIEA constató que «la integridad física de la planta ha sido violada en varias ocasiones».
