Argentina nunca vivió un otoño tan frío desde hace casi medio siglo, una estación mucho más fría de lo habitual en el país vecino, apetecida por la acción del evento La Niña en 2022 | Daniel García / AFP / Metsul Meteorología
Muchos argentinos no nacieron cuando hizo mucho frío el otoño pasado. La continua infiltración de los vientos polares trajo bajas temperaturas al inicio de la temporada y el clima del trimestre de marzo al mayo en varios episodios a lo largo del otoño. Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), el otoño de 2022 fue el más frío de Argentina en casi medio siglo.
Los datos muestran que la temperatura promedio de otoño en Argentina desde 1976 no ha sido menor. Según SMN, esta temporada fue la quinta más fría de toda la serie histórica.
De todos los otoños, el más frío de la serie de datos fue precisamente el de 1976 con una anomalía negativa de más de 2ºC a nivel nacional.
Además de 1976, 1971, 1968 y 1965, quedó atrás el otoño de 2022. Ganó 2007, que antecedió al duro invierno de este siglo en Argentina y, durante décadas, se caracterizó por las nevadas y la acumulación en Buenos Aires. En diferentes partes del Gran Buenos Aires, esto no ocurre desde hace casi 90 años.
La anomalía de la temperatura nacional en el otoño de 2022 fue de -0,8 ºC, mucho más cercana a la registrada en 1965. 1965 estuvo marcado por una gran tormenta de nieve en tres estados del sur de Brasil. Passo Fundo, Soledade, Lagoa Vermelha, Cruz Alta e Ijuí en el norte de Rio Grande do Sulin también trajeron grandes cantidades de nieve después de fuertes lluvias en agosto en Santa Catarina y ciudades del oeste. Suroeste de Paraná.
Después de 2022, en 1984, fue igualmente memorable debido a una fuerte nevada en el sur de Brasil en agosto, pero estuvo marcada principalmente por copos de nieve en la ciudad de Porto Alegre. El 24 de agosto de ese año, la nieve se amontonó sobre los automóviles, plantas y techos de la capital, Rio Grande do Sulin.
En 1976, encabezó la lista de los inviernos más fríos jamás vistos en Argentina, caracterizado por los inviernos más duros del sur de Brasil. Luego del frío mayo, en 2022, los meses de junio, julio y agosto estuvieron por debajo del promedio en el sur del país.
El otoño más frío desde 1976 es otra indicación de la analogía de que el invierno de este año en el sur de Brasil será severo o, a menudo, estará marcado por episodios severos y fríos severos (notas anteriores al comparar patrones climáticos). Probabilidad de nieve. La gran dificultad es que el clima en el mundo de hoy es diferente al de hace 40 o 50 años, lo que hace que la analogía sea mucho más complicada de lo que era hasta finales de este siglo.
Aunque el invierno de 1976 fue severo, no hizo demasiado frío. Los eventos de ese año fueron pocos y distantes entre sí. Curiosamente, el invierno de 1976-1977, es decir, el trimestre de diciembre de 1976 a febrero de 1977. Uno de los más fríos que ha experimentado Estados Unidos Con terribles olas polares desde el Ártico con severas consecuencias económicas y sociales en el país norteamericano.
MetSul Meteorologia ha estado informando síntomas crecientes desde abril con indicaciones históricas de una mayor probabilidad de eventos de frío severo este año. En abril, el El primer informe MetSul se basó en el frío severo Los que asistieron al evento han sido mencionados durante muchos años. Resfriado intenso en la tercera semana de mayo.Cuando una gran masa de vientos fríos llegó a 17 estados y al distrito federal.
los Los vientos fríos de mayo han sido más intensos en el centro de Brasil desde 1977.. Ha estado a cargo de Brasilia, Goiania y Belo Horizonte desde 1977 y en menor medida en Sao Paulo desde 1990. Llevó nieve a los tres estados del sur y, a mediados de mayo, Planalto Sul Catarinense y São José dos se acumularon en la ciudad de Ausentes.
La suma de todas estas referencias históricas (frío extremo a fines de marzo, ola de frío inusual y generalizada en mayo y el otoño más frío de Argentina desde 1976) y el evento La Niña ha estado muy activa desde el otoño de 1999. Indicadores sólidos de que el invierno de 2022 puede tener más episodios de frío extremo y, si la analogía histórica es correcta, uno o dos eventos históricos severos y posibles de frío y/o nieve.
