abril 20, 2024

Diario el Analísta

Mundo de las noticias en español

Los capibaras invaden el barrio de Buenos Aires – Sylvia Colombo

En un país altamente polarizado como Argentina, la creciente aparición de capibaras en un barrio privado y acomodado del Gran Buenos Aires ha creado un nuevo debate político. Nordelta es un área de 1.500 hectáreas ubicada en el delta del río Paraná. Allí, en lo que alguna vez fue el hábitat natural de varios animales, se construyó un exclusivo y lujoso barrio, que hoy alberga a 40.000 personas. Muchas casas tienen un jardín con vistas al río.

Los capibaras siempre han estado en la región, pero en cantidades mucho menores. Con el avance de las propiedades inmobiliarias, sus depredadores naturales, como los jaguares que vivieron allí hasta que llegaron los humanos, han sido asesinados o desalojados. Como resultado, los capibaras, que se reproducen rápidamente, comenzaron a dominar el paisaje. Hoy, la población estimada de Nordelta es de 400 capibaras. Según las proyecciones de los ambientalistas, podría llegar a 3.000 en menos de dos años.

La semana pasada sucedieron varios episodios divertidos y algunos violentos. Se ha visto a los capibaras, que a menudo nadan en las casas, devorando jardines y jardines bien cuidados, distribuyendo montones de excrementos y asustando a los niños. Aunque es un roedor que no ataca a los humanos, hubo un enfrentamiento entre ellos y las mascotas, en el que varios perros resultaron heridos.

Algunos vecinos han adoptado un comportamiento más hostil, disparando escopetas al aire para intentar asustarlos.

Las fotos de la «invasión» de los capibaras, que suelen andar en grupos familiares de 10 a 20 animales, empezaron a circular en hamacas y rápidamente se convirtieron en memes. Entre los usuarios de Internet de la izquierda, la llegada de los animales fue vista como la venganza de la naturaleza contra la furia inmobiliaria del capitalismo. Por otro lado, los vecinos del lugar han mostrado su desesperación, mostrando sus jardines destruidos o sus mascotas heridas.

Hasta ahora, los planes para solucionar el problema no han salido del papel y están generando mucho debate. Según la Asociación de Vecinos de Nordelta, la idea es fomentar la «convivencia pacífica» entre seres humanos y capibaras. Al mismo tiempo, crear un espacio donde puedan quedarse y tener suficiente comida, “para que no tengan que atacar los jardines”. En el último caso, dicen, planean transportarlos a otra parte.

Hay vecinos que piensan que las medidas son insuficientes, otros que llevará tiempo. Otros buscan «entablar amistad» con los capibaras e invitarlos a tomar mate. Mientras tanto, en el exterior, las organizaciones medioambientales y de derechos de los animales piden soluciones más estructurales. Entre ellos, se encuentran los avances de la construcción de condominios en una zona rica en flora y fauna.

Aunque no se ha tomado ninguna decisión, los capibaras o «carpinchos», como decimos en español, están entre los temas candentes en Argentina.

Meme circulando en las redes, capibaras como los talibanes se apoderan de Kabul (@NicoDelRojo)