El ex capellán militar Franco Reverberi Boschi, quien sirvió bajo la dictadura militar en Argentina entre 1976 y 1983, está siendo extraditado de Italia a Argentina. Acusado de haber participado en actos de tortura, secuestros y asesinatos, su situación ha llamado la atención internacional.
Si bien la decisión de extradición fue tomada por la Corte de Apelaciones de Bolonia en Italia, existe la posibilidad de apelación ante la Corte Constitucional, según información del embajador argentino en Italia, Roberto Carlés. El veredicto final aún no se conoce.
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crímenes contra la humanidad
Los delitos por los que se acusa al ex capellán ocurrieron durante la dictadura militar argentina, cuando era capellán auxiliar del Escuadrón de Exploración Alpina 8 en San Rafael, Mendoza. Los cargos apuntan a su participación en violaciones de derechos humanos en un centro clandestino de detención conocido como «La Départementale».
Las historias de los sobrevivientes y las familias de las víctimas atrajeron la atención internacional, y en 2011 Reverberi huyó del país mientras Argentina se preparaba para juzgar los crímenes de lesa humanidad cometidos durante la dictadura.
Situación jurídica de Reverberi Boschi
Se hizo una primera solicitud de extradición en 2013, pero fue rechazada por los tribunales italianos porque se refería exclusivamente a casos de tortura. En el sistema legal italiano, la tortura no es un delito imprescriptible, a menos que se combine con otros delitos que pueden conducir a cadena perpetua.
Sin embargo, nuevos testimonios obtenidos durante el juicio apuntan a la participación de Reverberi en el secuestro y asesinato del activista peronista José Berón bajo el régimen militar. Con base en esta nueva prueba, Argentina renovó la solicitud de extradición.
Y ahora, ¿qué esperar?
Ahora, el panorama legal del ex capellán Reverberi Boschi es incierto. Si bien Italia ha decidido extraditar, queda la posibilidad de apelar ante el Tribunal Constitucional. A la espera de este veredicto, el destino del ex capellán está en suspenso, mientras Argentina espera su regreso para llevar a cabo el juicio por crímenes de lesa humanidad.
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