Emprendedores abren coworking centrado en abogados en São Paulo – Pequeñas empresas Grandes empresas

El argentino Benjamín Muñoz y Leo Fischer de São Paulo se conocieron mientras estaban en la universidad en correcto en la ciudad de Sao Paulo. Un tema común fue la cantidad de compañeros abogados que trabajaban en oficinas pequeñas o necesitaban espacio físico de forma independiente. De las conversaciones, la idea de montar un co-trabajo totalmente centrado en el sector jurídico que, además, ha estimulado redes.

Luego fundaron Law Works, un coworking que ofrece tanto planes presenciales (para aquellos que quieran trabajar localmente) como planes virtuales. El plan virtual está dedicado a los profesionales que prefieren trabajar desde casa, pero que necesitan una dirección fiscal y profesional. Con esto, la empresa se encarga de recibir el correo y atender las llamadas de los clientes de forma personalizada.

La primera unidad abrió en Buenos Aires, Argentina, en 2018. “Resultó ser un éxito mayor de lo que habíamos imaginado. En tres meses alcanzamos el punto de equilibrio y en seis meses ya estábamos operando a plena capacidad y necesitábamos una expansión ”, explica Fischer. Sorprendidos positivamente por el éxito de la empresa, los empresarios decidieron exportar el modelo a la ciudad de São Paulo. El espacio abrió en julio de este año.

Para Fischer, el éxito de Law Works proviene precisamente de ofrecer una diferencia respecto a los coworkings tradicionales que, si bien parecen interesantes para los abogados, presentan características que dificultan la adaptación de los profesionales. “Muchos lugares son más modernos, con una mesa de ping-pong y cerveza en la entrada, y eso es bueno para mucha gente. Sin embargo, un abogado que se ocupa de casos delicados y recibe clientes necesita un ambiente sobrio ”, dice.

A pesar de su reciente apertura, el espacio ya tiene una gran demanda por parte de abogados, asistentes legales y otros profesionales legales. “Puede parecer obvio, pero no lo esperábamos al principio. Legaltechs que producen software para ayudar a la productividad de los abogados quieren estar en el mismo entorno ”, dice Fischer. Actualmente, el coworking cuenta con 25 integrantes (incluidos virtuales y presenciales), con la esperanza de llegar a 100 profesionales que trabajan en el espacio físico a principios de 2022. La meta es ganar R $ 1 millón. Para fines de este año, alcanzando R $ 2,5 millones en un año de operación.

Los empresarios planean abrir otra unidad en São Paulo, en la Avenida Paulista, a partir del próximo año. Otro objetivo es ir a la Ciudad de México también en 2022.

Según Fischer, el sector del coworking ya era prometedor antes de la pandemia. “El modelo híbrido era una tendencia que ya estaba sucediendo. Ahora no es ninguna sorpresa. La pandemia solo ha acelerado este proceso ”, explica el emprendedor, que cree que el futuro es aún más prometedor para los coworkings de nicho. “Es difícil tener un lugar que acomode a un abogado, un médico, un arquitecto, un ingeniero, un diseñador, etc. Esto tiene sus ventajas, por supuesto, pero cada profesión aún tiene sus propias necesidades.

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