Mako de Japón participa en uno de los últimos actos oficiales antes de perder el título de princesa

A la princesa மகோ De Japón y Key Comoro Se casaron a finales de este mes después de un compromiso de cuatro años. La boda se pospuso más de una vez, y los periódicos locales especulan que podría no suceder, pero ahora en realidad parece la hija mayor del príncipe. Fumihito Durante muchos años le decía «sí» a su pareja.

Aunque no llegó el día, Kee aprovechó su reciente visita a Japón – ya llevaba dos años en Estados Unidos – donde estudió – para ver a su futura suegra. La princesa estuvo recientemente con su madre, la princesa. Kigo, En la ceremonia de la cosecha de arroz.

Uno de los últimos actos oficiales de Mako como princesa, porque perdería su título cuando se casara con Komuro, fue cuando la joven, junto con su madre, recolectaron varias espigas de arroz, que luego se usaron en la ceremonia de aprobación. Dijosai, Tiene lugar en noviembre. En el campo de arroz, el sacerdote sintoísta reza antes de que el propietario y su personal, en traje tradicional, corten las plantas.

Tenga en cuenta que este fue uno de los últimos deberes oficiales de Mako al servicio de la familia imperial. La joven está a punto de despedirse de la vida que siempre ha conocido y convertirse en plebeya, norma que casa a mujeres de la familia. Cuando se produzca la fusión y Mako pierda su estatus como resultado, la nueva generación de miembros de la familia imperial estará formada por solo tres personas: VoyHija del emperador Naruhito, Cómo, e Hisahido, Ambos hijos de príncipes.

Una vez que se casen, las dos jóvenes perderán su estatus, y se acerca una crisis de herederos, y Hisahido, ahora de 15 años, algún día será emperador, pero se quedará para gobernar sola sin ninguna red de apoyo, y sus hermanas y su prima. ya no podrá realizar funciones reales.

El gobierno japonés mantiene la posición de que a los crisantemos no se les permite ascender al trono o mantener el estado de plebeyos casados, por lo que si no se toma una decisión rápidamente, puede sobrevenir una crisis de sucesión en los años siguientes.