“Todos esperamos que nos representen bien en ese evento, sabiendo que lo más importante no es ganar sino competir sanamente y dando todo de sí”, señaló el jefe de Estado al recibir a los atletas en el Salón de los Científicos de la Casa Rosada.

También participó del encuentro el titular de la Federación Argentina de Centros Comunitarios Macabeos (Faccma), Javier Veinberg, entre otros directivos.

Con 686 inscriptos, la delegación argentina será en esta ocasión la segunda en importancia, sólo superada por la de los Estados Unidos que llevará alrededor de 1.200 atletas.

Para esta edición, en que se conmemorarán los 50 años de la reunificación de Jerusalén, intervendrán 10.000 deportistas judíos, de los cuales 2.500 son israelíes y los restantes provenientes de 70 países.

El tradicional evento se desarrollará en diferentes ciudades de Israel, en tanto que la ceremonia de apertura tendrá lugar en la ciudad de Jerusalén y el cierre en Tel Aviv.

Las Macabeadas Mundiales comenzaron en 1932, la Argentina participó por primera vez, en 1950, y en la edición anterior, realizada en 2013, la delegación nacional peleó por los primeros puestos con Israel y los Estados Unidos.