En la Casa Rosada aseguran que su participación en actos y tareas vinculadas a lo social se irá notando "de a poco", pero niegan estar midiendo su imagen por medio de encuestas de cara a algún compromiso electoral.

Se trate o no de una estrategia planificada de instalación, la primera dama, Juliana Awada , incrementó en las últimas semanas su exposición mediática, días en los que los cuestionamientos a la "sensibilidad" social del Gobierno incluyeron a importantes sectores, como la Iglesia y el sindicalismo.

Ayer, muy temprano, Awada y la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley , llegaron a la provincia de Catamarca, visitaron la sede local de la Casa Cuna, estuvieron en un comedor comunitario y se juntaron con la gobernadora, Lucía Corpacci, con quien el Gobierno firmó un convenio de cooperación y la adhesión de esa provincia al Plan Nacional de Primera Infancia.

"Podemos demostrarle a la gente que, más allá de los signos políticos y de las cuestiones partidarias, en definitiva tenemos una obligación que supera todo, que es trabajar por la gente", dijo la gobernadora peronista durante el acto, en el que entregó ponchos de regalo a Stanley y Awada, siempre muy sonriente. "Estamos convencidos de que en materia social no existen banderas políticas", coincidió la ministra de Desarrollo Social.

No se trata de la primera aparición de Awada en un acto de tono "social" durante la gestión de su marido, el presidente Mauricio Macri .

A fines del mes pasado, estuvo -también junto a Stanley- en la localidad de Monte Quemado, en Santiago del Estero, visitando la fundación Haciendo Camino, con la que colabora hace varios años.

"Me duele ver que hay tantos chicos y padres con tantas necesidades. Todos nos transmitieron el deseo de poder tener una vivienda digna, trabajo y salud", dijo entonces Awada, quien tuvo su "debut" protagónico cuando presentó a la primera dama norteamericana, Michelle Obama, durante un acto compartido en el Centro Municipal de Diseño, en Barracas, en marzo pasado.

Ayuda en bajo perfil

Cerca de la primera dama le quitaron significación política a la actividad de ayer.

"Siempre está ayudando, aunque mucha gente no lo sepa", afirmó una fuente que conoce la actividad de Awada. ¿Por qué el bajo perfil en ese sentido? "Sabe que hay mucha gente que la está pasando mal, no quiere molestar a nadie, pero está seguro de que todo va a ir mejorando", agregaron cerca de la primera dama.

Cerca del Presidente reconocen, no obstante, que la cercanía de Awada "ayuda" a mejorar la imagen del Presidente.

Recuerdan, incluso, que su "calidez" permitió algunos intercambios afectuosos con el propio papa Francisco, cuando junto a Macri lo visitaron en el Vaticano. "Preguntó dos veces por Antonia, estuvo muy agradable", confesó alguna vez la primera dama.

Sin reconocer intencionalidades políticas, voceros del Gobierno también prometieron que al viaje de ayer a Catamarca seguirán otras apariciones de Awada sin su marido, acentuando así su perfil de "preocupación" por la situación social y los afectados por medidas de ajuste implementadas desde la Casa Rosada.